
ARGUMENTO DEL CUENTO.
EL cuento "Quiero aprender a volar", narra el proceso de crecimiento personal de una niña, quien enfrenta dificultades emocionales y familiares, como la distancia con sus padres y el desinterés escolar. Por otro lado, a través de sus viajes y encuentros con figuras importantes, esta niña aprende sobre perseverancia, integridad y el valor de aprovechar oportunidades. Y nos enseña que el verdadero valor reside en el aprendizaje y el crecimiento que provienen de nuestras experiencias. Por último, la historia enseña que enfrentar desafíos con una mentalidad positiva que nos permite encontrar nuestro propio camino hacia un nuevo futuro.

REFLEXIÓN PERSONAL.
"QUIERO APRENDER A VOLAR
Este cuento "Quiero Aprender a Volar" me lleva a reflexionar sobre cómo cada uno de nosotros enfrenta sus propios desafíos y busca su lugar en el mundo. La historia de Tefy, una niña que lucha por comprender una realidad familiar dolorosa, resuena profundamente. Su anhelo de "volar" simboliza esa aspiración innata que todos compartimos, la necesidad de superar límites y encontrar autenticidad en medio del caos de nuestras vidas.
Tefy nos muestra que el camino hacia el crecimiento personal no es fácil. A través de sus viajes y los encuentros con figuras importantes como el "viejo luchador" y el doctor Aliro, aprendemos que la valentía y la perseverancia son esenciales para enfrentar nuestras dificultades. La verdadera superación no consiste en eliminar nuestros problemas, sino en encontrar significado en ellos y en el proceso de lidiar con ellos.
El viaje a Venezuela y la búsqueda de Eugenio Espejo resaltan que, aunque a menudo no tengamos respuestas claras, cada etapa de nuestra vida tiene un valor profundo. Las dificultades que enfrentamos pueden enseñarnos lecciones valiosas y ofrecernos nuevas perspectivas, guiándonos hacia un sentido de consuelo y dirección.
Finalmente, la historia de Tefy nos invita a abrazar nuestras luchas y a ver en ellas oportunidades para crecer. Aceptar que cada desafío es parte de nuestro viaje nos permite descubrir nuestra verdadera fuerza interior. En lugar de temer lo desconocido, podemos aprender a verlo como un espacio para explorar, aprender y, en última instancia, "volar". Esta reflexión nos acerca a ser la mejor versión de nosotros mismos.